Siento ánimo refrescante, ímpetu e inicio el día con fuerza.
Me alejo de momentos paralizantes por el agotamiento y encuentro nueva energía y vitalidad.
Allá donde se necesita dinamismo, reina el cansancio.
El mero hecho de pensar en lo que hay que hacer provoca sensación de agotamiento y debilidad en la persona afectada. Esto no sucede únicamente en lo que a esfuerzos mayores de lo normal se refiere, sino también a la hora de realizar tareas cotidianas.
A menudo, las obligaciones pendientes se perciben con estrés y se acumulan como una carga mental de tal manera, que casi es imposible cumplirlas. De esta forma se crea la sensación de sobrecarga y parálisis. Tras terminar la tarea, la persona afectada se da cuenta que no le costó mucho.
Esta flor se clasifica en el grupo emocional «Inseguridad«.
Cómo ayuda esta flor
Gracias a la ayuda del hojarazo, uno deja de cuestionar sus fuerzas. Las obligaciones se acometen con energía y sin haber dudado de las capacidades propias.